hontanillademolicion

domingo, septiembre 10, 2006

Hasta los académicos les han "calado"


Hay cosas de las que una está convencida. Una de ellas, es la vergüenza que genera el hecho de tener alcaldes, consejeros, procuradores y parlamentarios del jaez que tienen los que nos han correspondido en gracia. Y quien haya entrado alguna vez por aquí conoce de sobras las razones.
Pero si esa misma tesis la mantiene un miembro de la Real Academia de la Lengua, la cosa queda más convincente y, sobre todo, mucho mejor expresada. Así es que cedo este espacio a Javier Marías, que el pasado domingo, 3 de septiembre, publicó un artículo en El País Semanal en el que retrataba a alcaldes, consejeros autonómicos y constructores inmobiliarios, incluyendo en su relación a los especímenes de Segovia, cuya fama se extiende y llega a los oídos de novelistas tan importantes como Marías. El artículo se titulaba Los villanos de la nación y aquí sólo transcribo un fragmento. Se lo dedico -con muy poco cariño, eso sí- a esos que, sabedores de que tienen ganada la partida, siguen con la idea estúpida o interesada de que hay que hacer todo lo posible para que sigamos con las perspectivas de desarrollo que la ciudad y su alfoz demandan.

Yo no sé si los buenos y honrados constructores y alcaldes, empresarios de obras públicas y responsables autonómicos –los habrá, sin duda– son conscientes de que sus respectivos gremios se han convertido en la hez del país, y sus componentes en los más detestados y despreciados por los ciudadanos decentes: en los villanos de la nación, en los más desacreditados, quizá dentro de poco en los apestados, desde luego en los que más vergüenza causa tener cerca. Allá ellos si no hacen nada para remediarlo. Pero así son las cosas en la percepción del hombre vulgar, y no cabe enfadarse con lo que la gente percibe, que es más o menos lo siguiente: España está siendo destrozada por el chalaneo entre esas dos o cuatro profesiones. Desde que los permisos de edificación y la recalificación de terrenos son competencia “transferida”, municipal o autonómica según los casos, aquí se construyen anualmente más viviendas que en los más importantes y poblados países europeos juntos, sin que se vea más demanda que la puramente especulativa y sin que la demencia constructora signifique una bajada de los precios (por aquello de la abundante oferta), sino todo lo contrario, un incesante y escandaloso aumento. La proliferación salvaje no se limita a lugares que desde antiguo son gatuperios, como Marbella o la costa levantina, sino que se da en casi todo el litoral mediterráneo (brutales los planes para Almería y Murcia), en parte del atlántico (les va tocando el bestial turno a Galicia y Cádiz) y en las zonas cercanas a las grandes metrópolis (Guadalajara, Segovia y Toledo están ya en proceso de transformarse en monstruosidades submadrileñas). Para llenar el país de cemento y ladrillo los constructores y los alcaldes –los del PP a la cabeza, pero los del PSOE se les distinguen poco en esto– no se paran en barras: si hay que cargarse el paisaje, el equilibrio ecológico o el patrimonio histórico-artístico, arrasan con todo ello; si donde planean erigir sus adefesios no hay agua para los habitantes futuros (aún menos para los ridículos campos de golf escoceses que proyectan y que, según ese cerebrillo del PP, Pujalte, no consumen nada), les da lo mismo, no consideran suyo ese problema. Si nuestras ciudades están perennemente levantadas, cavadas, destripadas, invivibles, nadie cree ya que sea por necesidad o mejora, sino porque los ayuntamientos están al servicio y porcentaje de las desaforadas y voraces empresas de obras, que han decidido enriquecerse a costa de torturar a los ciudadanos. Las recalificaciones de terrenos son hoy tipo relámpago, y cada poco nos enteramos de que el negocio inmobiliario está plagado de ex-ediles, ex-concejales, ex-autonómicos y ex-cuñados, gente de la que ha dependido a veces, apenas un par de años antes, la revalorización arbitraria y desmedida del suelo.

3 Comments:

At 4:29 p. m., Anonymous Anónimo said...

ME TEMO QUE TODOS ESTOS ALCALDES, CONSTRUCTORES, POLÍTICOS DE LA JUNTA Y OTROS AFINES, NO LEEN EL PAIS Y MENOS CUANDO DESCUBREN QUE LA PALABRA AGUA APARECE EN MUCHOS ARTÍCULOS, CLARO ESTÁ CASI SIEMPRE PARA SACARLES LAS VENGÜENZAS SI ES QUE ALGUNA VEZ LAS TUVIERON.

POCO A POCO IREMOS DANDO PASITOS Y SUBIENDO ESCALONES. SOLO HACE FALTA QUE ALGÚN EMPRESARIO QUE NO RECIBA EL % ACORDADO LO DENUNCIE Y ALGÚN FISCAL Ó JUEZ SE LO TOME EN SERIO.

DIGO YO QUE ALGUNA VEZ PENSARAN QUE LO DE MARBELLA EMPEZÓ COMO TODO ESTE DESVARIO....

 
At 4:51 p. m., Anonymous Anónimo said...

La concejala de Patrimonio comienza a ver la ''luz'' tras tres años en el cargo, no esta mal.

No obstante, apunta que el equipo municipal ha tenido que «afrontar numerosos problemas, heredados o nuevos, muchas veces consecuencia de la falta de una adecuada gestión y sensibilidad por parte de corporaciones anteriores». La solución de estos problemas, indica Domínguez, «es un gran reto para una concejalía nueva y todavía poco dotada, pero poco a poco vamos viendo luz en el panorama de la conservación y del respeto hacia el patrimonio. (Norte de Castilla 10-Sep-06)

 
At 10:22 a. m., Anonymous Anónimo said...

Muy bueno y muy bonito.
Pero...
¿Qué generacion tiene 3 pisos, uno en alquiler, otro en venta, y otro para los niños si no encuentran nada?
Además, tenemos un montón de gente con piscina y verdecito, que luego hace crítica social. Muchos usuarios de este blog, me temo.
No solamente es cuestion de políticos y constructores.
Toda la generación "pudiente", de 40 a 60, se ha sumado al pelotazo.
Y a esos, Marías no les ataca.
Por cierto, ¿Que fase de la burbuja inmobiliaria es la de buscar chivos expiatorios?

 

Publicar un comentario

<< Home